Heaven and Earth

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El último álbum de Kamasi Washington

A los 37 años, Kamasi Washington es el actual niño terrible del jazz. O, mejor, el músico de jazz que más y mejor entendió que había que abrirse del género sin abandonarlo para seguir honrándolo, y no solo a través de la ejecución de standards o de formatos ya establecidos como el trío de piano, contrabajo y batería, por citar solo uno. Washington –saxofonista, compositor, productor y líder de grandes bandas– se deja atravesar por varios géneros para componer una música incomparable, justamente porque es el resultado de una alquimia única, como suele suceder con las alquimias.

En Heaven and Earth, un álbum doble que es apenas su tercer trabajo solista formal (después de innumerables grabaciones con grandes músicos, mayormente como sesionista), la cruza de especies involucra a músicas ligadas al rock, a la world music, al hip hop y, claro, al jazz, pero siempre en sus versiones más libres, menos adocenadas. Una estética que por momentos recuerda a la experimental Sun Ra Arkestra, una banda de free jazz; en otros al afrobeat de Fela Kuti o el más cercano Manu Dibango; algo del rapero Kendrick Lamar; aires al John Coltrane de A Love Supreme, tanto en los aspectos musicales como en el espíritu devocional, y al Miles Davis posterior a Bitches Brew; toques de funk y psicodelia alla Grateful Dead, y más.

Toda esta ensalada musical podría dar como resultado un plato incomible, es cierto. Pero en manos de Kamasi Washington se convierte en un menú gourmet. Esta combinación de sonidos y ritmos de origen y tiempos bien diversos hace que se dificulte la tarea de describir rápidamente y en pocas palabras la música del saxofonista californiano. Como suele suceder, en esa dificultad radica buena parte de su atractivo, ya que el factor sorpresa –un recurso no muy utilizado por estos días en la música, y en el arte en general– genera una apetencia quizá desmedida de quienes gustan de su música, demanda que, sin embargo, al menos hasta ahora, Kamasi supo satisfacer.

Las casi dos horas y media de Heaven and Earth, a razón de ocho composiciones por disco, nos trasladan a lugares de celebración y de contemplación que nos vuelve más livianos y hacen que el viaje sea más que placentero. Para lograrlo, Washington es secundado por The Next Step, su grupo habitual, y por la banda orquestal West Coast Get Down, además de un seleccionado multigénero integrado por Thundercat, Terrace Martin, Ronald Bruner Jr., Cameron Graves, Brandon Coleman, Miles Mosley, Patrice Quinn y Tony Austin.

Al mismo tiempo que este álbum, publicó el EP The Choice, cinco temas que sirven de corolario a lo anterior. Kamasi había entrado por la puerta grande del jazz y sus alrededores con The Epic (2015), al que le siguió Harmony of Difference (2017), discos que la crítica adoptó casi de inmediato por su diversidad, originalidad y frescura, los mismos atributos, entre muchos otros, que hacen de Heaven and Earth una obra insoslayable.
  

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