Mendoza, San Rafael

Turismo

Entre las varias alternativas que proporciona la diversa y maravillosa geografía del país, San Rafael debe ser uno de los sitios con mayor encanto para el turista. Esa combinación imponente y clara de cordillera, ríos, sol y vides, que ofrecen algunos de los mejores vinos del mundo, es irresistible. Procuran una paz y un descanso celestiales, pero también la posibilidad de hacer actividades y deportes de toda clase y excursiones por la naturaleza o la tradición cultural difíciles de olvidar.

¿Quién no sabe que el territorio argentino es un de los que ofrece al turista nacional o extranjero un menú interminable de lugares de las más diversas y bellas características. Sin duda, uno de esos lugares, y en una posición destacada por su atractivo, es San Rafael, la segunda ciudad en importancia en la provincia de Mendoza.  Desde hace muchos años, esta ciudad de más de cien mil habitantes se ha transformado en un verdadero imán tanto en lo económico como en lo cultural en la vida de la provincia y atrae a cientos de visitantes que disfrutan de los hechizos de su naturaleza, pero también de las múltiples posibilidades de recreación y asombro que ofrece.


La ciudad y su departamento recuerdan el nombre del huidizo virrey español Rafael de Sobremonte, quien ordenó fundar un fuerte a orillas del río Diamante, disposición que se cumplió el 2 de abril de 1805. Hoy, las ruinas de esa construcción se hallan en la histórica Villa de 25 de Mayo, a la que se considera un virtual museo urbano. Otros museos importantes en la ciudad son el Museo de Historia Natural (en el parque Mariano Moreno) o el de Bellas Artes, en la calle Irigoyen.


La Plaza General San Martín, donde se asienta una estatua ecuestre en homenaje al Libertador, data del año 1925 y está hoy remodelada. Frente a ella está la catedral de San Rafael Arcángel, exponente de la arquitectura neocolonial francesa y a su lado está la Torre de San Marco. Cerca se encuentra también el ex  Banco Hipotecario Nacional declarado patrimonio edilicio de la ciudad. A diez cuadras de este lugar esta el Parque Hipólito Yrigoyen, con el monumento al Gaucho Argentino y el Anfiteatro Chacho Santa Cruz, escenario de la fiesta anual de la vendimia.


A cuatro cuadras del Kilómetro Cero, otro lugar histórico, es la llamada Plaza del Inmigrante, que muestra la ex Estación del Ferrocarril, con su Museo Ferroviario y la locomotora que en 1903 arrastró el primer tren que arribó a la región. En ese lugar hay un mercado artesanal instalado en un vagón y abierto todo el año. Otra visita imperdible, a 6 kilómetros del centro y en la isla del Río Diamante, es el Parque Mariano Moreno, que incluye el Museo de Historia Natural, el Zoológico, zonas de camping y distintos restaurantes.


Si el turista viaja en enero, más precisamente en el fin de semana de la tercera semana, San Rafael celebra y convoca a la Fiesta de los Pueblos y el Vino, uno de cuyos escenarios principales es el Polideportivo Nº 1. Durante la fiesta se elige la reina de la ciudad. Como atracción cultural se aconseja también una visita a la Caverna del Puesto La Barda, en el área de Las Malvinas, un túnel donde se han encontrado piezas del pleistoceno. También en la Ciudad se levanta el Parque Juan Domingo Perón, donde se erige el moderno edificio del Centro de Congresos y Convenciones de San Rafael, obra recientemente inaugurada.
Muchos otros paseos, ofertas comerciales, acceso a casinos de primer nivel y una excelente cocina regional, siempre acompañada de los mejores vinos de San Rafael, se pueden encontrar en un viaje a esa ciudad.


Bodegas


Es muy raro que se viaje a Mendoza y no se intente conocer sus espléndidas bodegas, de las mejores del mundo. En San Rafael, el llamado Camino del Vino abre sus puertas a la tradición viñatera a través de un recorrido por distintas zonas  rurales, perfumados viñedos y prestigiosas bodegas, donde se pueden degustar exquisitos y reconocidos vinos, tales como Malbec, el Syrah y el Bonarda.
Con un suelo de características excepcionales para el desarrollo del cultura vitícola, las laboriosas manos de distintas generaciones hicieron de San Rafael un vergel y posicionaron la excelencia de sus vinos en el mercado nacional e internacional. Junto con el Gran Mendoza y el Valle del Uco, San Rafael es uno de los tres grandes oasis vitivinícolas de la provincia. Vinos muy tradicionales que se disfrutan en el país salen de la región. Y las bodegas, como parte de la promoción de sus productos, reciben en forma permanente contingentes turísticos.


Circuito de Alta Montaña


Una zona de naturaleza agreste permite desarrollar en San Rafael variadas actividades al aire libre: campamentismo, trekking, cabalgatas, mountain bike, indismo superior y también excursiones de pesca. Mediante un camino consolidado que bordea el río Atuel, se accede a la Laguna El Sosneado, apta para la pesca, a la Cueva del Indio y a las ruinas del Hotel Termal. El Sosneado ofrece una pileta de aguas termales al aire libre que tiene  propiedades curativas.
A sólo 33 kilómetros de la ciudad, ya emergen las primeras estribaciones con una serranía multicolor que integra la denominada Sierra Pintada. Y hacia el sur, desplazándose por la ruta nacional 144, se inicia un acceso a la Cuesta de los Terneros, que alcanza una altura máxima de 1.000 metros. De ahí se vuelve al Sosneado. En la estribación superior se encuentra una ventana natural que nos muestra el oasis San Rafael. Las salinas del Diamante son a su vez un paisaje patagónico  de 2.500 hectáreas, de las 1000 están bajo explotación.

 

El volcán Overo, en plena cordillera de Los Andes, se levanta majestuoso con su cima coronada de glaciares eternos. Es un volcán inactivo, con un entorno paisajístico de extraordinaria belleza. Su altura es de 4.629 metros, lo que lo hace apto para el andinismo superior. La Laguna El Atuel, por su parte, tiene origen en el homónimo y se alimenta de los deshielos, está adornada de importantes penitentes, en las inmediaciones de la mina de azufre, cuyas dependencias fueron abandonas en el año 1976.

 

Circuito del Cañón del Atuel

 

Al cañón del Atuel y el paraje  denominado Valle Grande se llega a través de la ruta provincial 173, totalmente pavimentada. La frondosa vegetación junto al río Atuel, que corre por su lecho de piedras, permite disfrutar de unas especiales vacaciones en convivencia con la naturaleza. Es un lugar de apabullante tranquilidad y un imán irresistible para los deportes náuticos. El paredón Valle Grand conforma un inmenso espejo de agua verde esmeralda que tienta sin remedio a la práctica de deportes tan atractivos como la natación, el buceo, el esquí, el remo, la motonáutica, el paseo en catamarán, el windsurf, la pesca deportiva o los safaris fotográficos.


A la vera del río Atuel, que encierra murmullos de años de historia geológica, se encuentran todos los servicios que el turista necesita, desde campings, cabañas, hoteles, restaurantes, proveedurías, complementados por una acorde vegetación. También los servicios de turismo aventura, que se desarrollan en el lugar, como: rafting, kayak, canotaje, cabalgatas, rappel, escalada, tirolesa, trekking, parapente, paseo en catamarán en el lago, windsurf, jet esquí, cuatriciclos.


Aguas arriba de la presa Valle Grande es posible internarse en el Cañón del Atuel, presencia viva de los orígenes del mundo, que el viento y la lluvia, como cinceles que trabajaron sobre las rocas han permitido descubrir las conformaciones naturales más variadas, como el Museo de Cera, Sillón de Rivadavia, El Lagarto, Los Viejos, Los Monstruos, la Ciudad Encantada, El Mendigo, Los Jardines Colgantes, Los Monjes, etc, por mencionar sólo algunos.
Y el río en su vertiginosa caída encierra una inmensa potencia que brinda al hombre, para generar la energía que el país a diario necesita. Dos lagos artificiales contribuyen a realzar la belleza dentro del Cañón, Aisol y Tierras Blancas. Allí se encuentra el complejo hidroeléctrico Los Nihuiles, que con sus tres centrales generan una potencia de 260.000 kw/h.

Emergiendo del Cañón a través de una sinuosa cuesta descubrimos la inmensidad del lago que conforma el dique El Nihuil, de 9.600 has., y en cuyo seno cobra vida una variada especie ictícola que invita al pescador a dar rienda suelta a su deporte favorito. También permite apreciar un espectáculo de colorido sin igual, cuando los amantes del windsurf despliegan cientos de velas multicolores a quienes practican el esquí acuático, se deslizan raudamente sobre las aguas serenas. Sobre la margen derecha se levanta la Villa El Nihuil, de los residentes. E barrio cuenta con todos los servicios, delegación municipal, capilla, centro de salud, servicio telefónico, destacamento policial, estafeta y camping. En la margen izquierda se encuentra el Club de Pescadores San Rafael con camping, cabañas, restaurante, pileta de natación, residencias de fin de semana, teléfono público, etc. Para regresar a San Rafael se utiliza la ruta provincial 180 empalmando la ruta nacional 144, pasando por Cuesta de Los Terneros, localidad de Cuadro Benegas e ingresando a la Ciudad por avenida Balloffet.

 

Circuito Cañón del Diamante


El Río Diamante nace en la laguna homónima, en plena Cordillera de Los Andes y conforma una cuenca que también ha sido aprovechada para la producción hidroeléctrica, que con sus cuatro centrales generan 300.000 kw/h. A sólo 25 km de la Ciudad de San Rafael se encuentra la Villa 25 de Mayo, considerada un verdadero museo habitado, con caserío de adobe y calles flanqueadas por centenarios carolinos. .La Iglesia Nuestra Señora del Carmen, ubicada en la esquina de Gobernador Ortega y Chacabuco, fue declarada Monumento Histórico Nacional. rva las primeras imágenes y vestiduras de la época. También se puede visitar el Museo Narciso Sosa Morales, ubicado frente al fuerte.


Galileo Vitale es, a su vez, la primera obra construida sobre el río Diamante para aprovechar sus aguas para el riego artificial y ser distribuida mediante un complejo sistema de compuertas, en canales de hormigón. Está ubicado a sólo 27 km de la Ciudad y ofrece un magnífico paisaje con arboledas, en cuyo ámbito se pueden desarrollar actividades recreativas y campamentismo. Aguas debajo de este dique se halla instalada la cuarta Central de la Cuenca del Diamante, denominada Los Coroneles. A solo 33 km del centro de San Rafael se ha construido El Tigre, una presa compensadora cuyo contenido de agua se recupera por bombeo hacia el lago Los Reyunos. En sus cristalinas aguas se pueden cobrar ejemplares de pejerreyes y salmónidos, practicar deportes náuticos y disfrutar de sus balnearios naturales.


A una distancia similar de la ciudad, está la presa Los Reyunos, cuyo paredón presenta especiales características ya que se utilizaron materiales pétreos, compactos con arcilla, lo que permitió una ejecución sencilla y de mínimo costo. De 134 metros de altura, posee la singularidad de ser una de las primeras de bombeo de Latinoamérica. En su lago de 734 hectáreas se efectúa la siembra de alevinos, que genera buena pesca de salmónidos y pejerreyes. En su margen oeste se levanta un Club de Pesca y Náutica, un Apart Hotel, restaurante, proveedurías, cabañas, tres campings con todos los servicios; además se pueden alquilar embarcaciones, avíos de pesca, tablas de windsurf, realizar cabalgatas, caminatas, mountain bike y otras actividades.


El Embalse Agua del Toro, por su parte, se localiza en la denominada Pampa Amarilla, a 89 kilómetros de San Rafael. Es una presa con doble curvatura y se construyó íntegramente en hormigón ciclópeo empotrado en la roca viva. Su construcción conformó un lago de un lago de 1.050 hectáreas. Sobre su margen izquierda se levanta un complejo habitacional y los obradores que la Empresa Agua y Energía Eléctrica de la Nación construyó para albergar al personal y desarrollar tareas de construcción de la presa.