Siete hazañas del deporte argentino en 2016...y el fútbol

Deportes

Tres medallas de oro en los Juegos Olímpicos, la primera Copa Davis, éxitos automovilísticos y el futsal le dieron al país las alegrías que el fútbol nos sigue debiendo.

 

Como todo año olímpico, el balance deportivo no puede ignorar lo acontecido en los Juegos. Si bien es cierto que en algunas disciplinas los campeonatos mundiales tienen mayor o igual peso que la competencia olímpica, por historia, cantidad de deportes involucrados y atletas de élite que participan, los Juegos Olímpicos son considerados la cita más importante del deporte a nivel mundial. Río de Janeiro 2016, con sus tres preseas doradas, significó para nuestro país la cosecha más alta de oros de su historia, solo igualada en Londres 1948, Los Ángeles 1932 y Ámsterdam 1928. Sin embargo, sobre el cierre del año, llegó el triunfo más rutilante: por primera vez en la historia y después de cuatro finales perdidas, la Argentina ganó la Copa Davis. El automovilismo y el futsal también dieron alegrías, pero la cuenta pendiente sigue estando en el deporte que más nos gusta, el fútbol.

 

La ensaladera más preciada
Es curiosa la Copa Davis. Lo que no logró la Argentina cuando Guillermo Vilas y José Luis Clerc descollaban al mismo tiempo en el circuito mundial ni David Nalbandian y Juan Martín del Potro cuando la convivencia forzada no parecía aplacar la potencia de sus golpes, y mucho menos cuando otros enormes tenistas de nuestro país coincidieron en un gran año pero ni siquiera alcanzaron la final, se logró en un año bastante opaco a nivel ATP de nuestros jugadores. Más allá del regreso espectacular de Delpo, ningún compatriota está entre los mejores 40 del circuito al finalizar el año y solo se ganaron cuatro títulos. Así y todo, la Argentina se alzó por primera vez en su historia con la ansiada Ensaladera de Plata, la misma que se le negó en 1981, 2006, 2008 y 2011. En una serie emocionante, el equipo dirigido por Daniel Orsanic le ganó 3 a 2 a Croacia en Zagreb. Primero había sido derrota de Federico Delbonis ante Marin Cilic, igualó la contienda Del Potro frente a Ivo Karlovic y quedamos nuevamente abajo cuando el tandilense y Leo Mayer no pudieron en el dobles frente a Cilic e Ivan Dodig. Se llegó al domingo 1-2 y ahí se puso todo para dar vuelta la serie y alcanzar la gloria: primero fue Del Potro quien se deshizo de Cilic en 5 sets y tras haber perdidos los dos primeros y luego Delbonis quien sorpresivamente le ganó en sets corridos a Karlovic. Sin dudas, el suceso deportivo del año.

 

Pequeña de oro
Los Juegos de Río no pudieron empezar mejor. El 6 de agosto, primer día de competencia, la judoca Paula Pareto le dio a la Argentina la medalla de oro en la categoría de hasta 48 kilogramos. Un verdadero presagio de lo que vendría después. La rusa Irina Dolgova (última campeona juvenil), la húngara Eva Csernoviczki, la japonesa Ami Kondo (campeona mundial 2014) y la coreana Jeong Bo-Kyeong fueron las "víctimas" de la Peque en su día más glorioso. Si su triunfo no fue tan sorpresivo como el del hockey masculino y el del yachting fue solo porque venía de su mejor año (en 2015 conquistó el Campeonato Mundial disputado en Astana y terminó segunda en el ránking) y porque ya era muy conocida por el gran público desde la medalla de bronce obtenida en Pekín 2008.

Medalla al ejemplo
Diez días hubo que esperar para que el deporte argentino metiera otro batacazo en Río 2016. La medalla de oro en vela de Santiago Lange y Cecilia Carranza Saroli no solo fue un premio al rendimiento que tuvieron sobre el agua sino que además un condimento extra que le dio a la victoria el status de epopeya: menos de un año antes a Santiago lo operaron para sacarle un pulmón por un cáncer. Con 54 años él y 29 años ella, la pareja le dio al segundo deporte que más medallas logró en la historia nacional (después del boxeo) su primer oro. Lo hicieron en Nacra 17, una categoría mixta que hizo su debut olímpico. De las 13 regatas que componen la competencia,  ganaron dos  y llegaron segundos en tres, aventajando por un punto de diferencia a las parejas australiana y a la austríaca, plata y bronce respectivamente.

 

La frutilla del postre
Los Juegos Olímpicos le tenían reservada otra alegría de las grandes a la Argentina. Y esta sí que fue pura sorpresa, porque desde hace ya un buen tiempo a esta parte, hablar de hockey en la Argentina es referirse a Las Leonas. Sin embargo, los que se llevaron el oro en Brasil fueron los hombres. Con Carlos Chapa Retegui en la dirección técnica, los chicos del hockey quedaron terceros en su grupo con dos triunfos, dos empates y una derrota y clasificaron a cuartos de final. Allí vencieron 2 a 1 a España, luego fue 5 a 2 a Alemania (el equipo de mejor rendimiento hasta ese momento) en semifinales y 4 a 2 a Bélgica en el partido decisivo. Gonzalo Peillat fue el máximo anotador argentino con 11 tantos.

Pechito López tricampeón
La Argentina tiene un piloto que este año se consagró por tercera vez consecutiva campeón mundial de una de las categorías organizadas por la Federación Internacional de Automovilismo, el ente que rige las competencias de autos. Es cordobés, tiene 33 años y se llama José María López. Le dicen Pechito. Ya casi sin margen para aspirar a correr en Fórmula 1, un poco por la edad y otro tanto por los vericuetos financieros que implica la competencia más popular, López se viene destacando en cuanta competencia se mete. Hace tres años se sumó al equipo de Citroen que compite en el WTCC (World Touring Car Championship) y la simbiosis fue perfecta: ganó en 2014, 2015 y también 2016. Terminado de la mejor manera su ciclo en la categoría, ya está compitiendo en la temporada 2016-17 de la Fórmula E, la tercera de los monoplazas eléctricos que organiza la FIA con un reglamento muy similar al de la Fórmula 1.

 

Son leyenda
No por repetido es menos meritorio lo de los hermanos Patronelli en la carrera de cuatriciclos en el Rally Dakar. Después de ausentarse en la edición de 2015, los de Las Flores volvieron con todo en 2016 y repitieron campeonato y subcampeonato, como en 2012 y 2010. El ganador fue Marcos por tercera vez en la historia sudamericana de la carrera más exigente del mundo. Tiene además dos subcampeonatos. En tanto su hermano Alejandro ganó en 2011 y 2012 y fue segundo en esta última edición y en 2010. Disconformes con el recorrido que la organización armó para 2017, el próximo año no correrán.

 

El otro fútbol
El fútbol es, por lejos, el deporte más popular de la Argentina. Sin embargo, su hermano menor el Futsal es seguramente el más practicado. Pero así y todo poco se sabía en nuestro país de las competencias del fútbol reducido hasta este año, cuando la Selección Nacional obtuvo por primera vez en su historia la Copa del Mundo disputada en Colombia. Hasta ahora, lo mejor del conjunto albiceleste había sido un cuarto puesto en el Mundial de China Taipei 2004. El Mundial de Futsal es organizado por la FIFA desde 1989 y también se disputa cada cuatro años. Brasil lo ganó 5 veces y España 2, por lo que la Argentina es el primer país que rompe con esa hegemonía. Para llegar al título la Selección ganó su grupo con victoria sobre Kazajistán por 1 a 0, triunfo sobre Islas Salomón por  7 a 3 y empate en dos tantos con Costa Rica. Luego hubo victoria en tiempo suplementario 1 a 0 sobre Ucrania en octavos, 5 a 0 a Egipto en cuartos, 5 a 2 a Portugal en la semifinal y 5 a 4 a Rusia en el partido decisivo. Fernando Wilhelm, que juega en el Benfica de Portugal, fue elegido el mejor jugador del torneo, y el arquero Nicolás Sarmiento el mejor de su puesto.
 

Ay, la Selección
¿Puede ser malo un año en el que el equipo argentino perdió por penales la final de la Copa América luego de haber ganado cuatro partidos por goleada y uno por 2 a 1 a Chile, luego su verdugo en el match decisivo? ¿Puede ser malo un 2016 en el que la Argentina lidera el ránking de selecciones de la FIFA? Incluyendo el único amistoso (1 a 0 a Honduras), este año la Argentina ganó 10, empató 3 y perdió 2. No está mal. Pero quedó fuera de la zona de clasificación directa al Mundial de Rusia 2018 en las Eliminatorias y cambió el entrenador a mitad de año, un poco por la frustración de la Copa perdida pero también como coletazo de la interminable crisis institucional que atraviesa la AFA. En los Juegos Olímpicos, aunque se compite con un equipo Sub 23, el fracaso fue mucho más evidente: no clasificó en un grupo que compartía con Argelia, Honduras y Portugal. Entonces sí, la Argentina no termina de la mejor manera un año en el que hasta el público del  interior, siempre mucho mejor receptivo con el conjunto nacional que el capitalino, perdió por momentos la paciencia con el equipo y con algunos jugadores. Con el mejor del mundo y una segunda línea de futbolistas que cada fin de semana son noticia por sus excelentes rendimientos en Europa, la expectativa es mucho más alta que los resultados y la performance que muestra el equipo. Y a la par de los malos resultados, la presión mediática sobre el fin de un ciclo para varios de los integrantes del plantel se hace cada vez más fuerte. Todavía quedan seis fechas de Eliminatorias y Argentina depende de sí misma para llegar a Rusia, pero el desaguisado de la AFA en algún momento tenía que empezar a repercutir en la Selección. Esperemos una pronta vuelta a la normalidad.

Foto: www.aat.org.ar