Libros recomendados: Cuando Google encontró a Wikileaks



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Uno de los libros recomedados de este mes es Cuando Google encontró a Wikileaks de Julián Assange editado por Capital Intelectual

En junio de 2011, el periodista, programador, editor y fundador de Wikileaks, Julián Assange, que estaba bajo arresto domiciliario en casa de unos amigos en Norfolk, Inglaterra –hoy está asilado en la embajada de Ecuador en ese país-, recibió la visita de Eric Schmidt, director por entonces de Google. Le había solicitado especialmente una entrevista y llegó a la cita con varias otras personas, entre ellas Jared Cohen, para charlar con Assange sobre los problemas a los que la sociedad tiene que hacer frente en estos días y las soluciones tecnológicas que la red global podría ofrecer a ellos. Tiempo después del encuentro, Schmidt y Cohen publicaron un libro con el contenido de aquella conversación que mantuvieron con el creador de Wikileaks en el 2011.

    Cuando Assange la leyó comprobó que la versión dada por sus visitantes de aquel encuentro no correspondía a la realidad de lo ocurrido y decidió entonces dar su propia transcripción de los hechos en lo que después se transformó en este trabajo: Cuando Google encontró a Wikileaks. En el momento en que Assange recibió a esa delegación estaba atravesando ya dificultades con el gobierno norteamericano a raíz de la publicación de unos cables diplomáticos de los Estados Unidos. Según dice nunca supuso que Schmidt podía llegar a visitarlo no solo en su condición de jefe de Google sino como representante ya en ese instante del Departamento de Estado, rol que, obviamente, ocultó.

     Gran parte de este libro está dedicado a demostrar con abundancia de datos, obtenidos luego por Assange en una investigación posterior, cómo Google se ha transformado en un instrumento que le permite leer a la Agencia de Seguridad Norteamericana y al FBI los correos electrónicos de todo el mundo y, a la vez, cómo ha ingresado en el campo de los negocios comunes que las grandes corporaciones tienen con el Estado norteamericano. El trabajo abunda también en datos que describen el itinerario siempre en ascenso de Schdmit dentro de la plutocracia política que domina el sistema de seguridad y poder en ese país y como un habitué más en la aristocracia que circula por los pasillos de la Casa Blanca, como lo demuestra que se haya unido al consejo de administración de un grupo radicado en la Washington D.C: la New America Foundation, una fusión de diversas fuerzas centristas bien conectadas entre sí (al menos en términos de capital en Estados Unidos). La fundación y sus cien empleados funcionan como un grupo de presión, que utiliza sus redes homologadas en materia de seguridad nacional, de política exterior y de especialistas en tecnología para publicar cientos de artículos y columnas de opinión cada año. En 2008, Schmidt fue nombrado presidente de dicho consejo de administración y en 2013 los principales proveedores de fondos para la fundación fueron el propio Schmidt y su esposa Wendy (con más de un millón de dólares cada uno), el Departamento de Estado, la Fundación Bill y Melina Gates. Entre los proveedores secundarios estaban Google, la  Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (la USAID) y Radio Free Asia.   

   Habitualmente se dice en estos días que Google se está convirtiendo en Internet. Y que su influencia en las elecciones y el comportamiento de la totalidad de los seres humanos se traduce en un poder real para influir en el curso de la historia. Ante esto, Assange afirma: “Si el futuro de Internet es realmente Google, mucha gente de todo el mundo –América Latina, Asia oriental y suroriental, el subcontinente indio, Oriente Medio, el África subsahariana, la antigua Unión Soviética e incluso Europa- debería empezar a preocuparse seriamente por buscar una alternativa a la hegemonía cultural, económica y estratégica de Estados Unidos. El imperio de “No seas malo” sigue siendo un imperio.”