Autora fundamental del teatro y la narrativa de este país, Griselda Gambaro es –a diferencia de alguno de sus pares- una artista que, además de imaginar para la ficción, puede también reflexionar con hondura sobre los fenómenos estéticos. A lo largo de su extensa y fructífera producción para la escena o para la novelística o el cuento, una y otra vez esta autora ha acompañado su labor con distintos artículos publicados por la prensa escrita o de textos destinados a charlas o conferencias magistrales. Cualquiera que haya seguido con atención su obra lo sabe, sin contar las decenas de entrevistas que ha concedido a diversos medios y en las que su pensamiento analítico brilla por la profundidad con que aborda tanto  la creación propia como ajena. Este libro reúne casi treinta textos –notas, ponencias y algunos artículos inéditos- que son el resultado de ese afán siempre recreado de observar y pensar en este caso el teatro a lo largo de las últimas cuatro décadas. Todos ellos son estupendos y están guidados por el mismo estilo lleno de transparencia de la autora de La malasangre y en ellos su mirada se desplaza por el rol histórico de las mujeres en el fenómeno teatral, las nuevas formas de representación en el teatro actual, el rol del dramaturgo, el vínculo de las obras con el contexto social y político y la voluntad de ruptura que expresa las nuevas generaciones escénicas. Sobre los dos últimos temas son especialmente esclarecedores los artículos finales del volumen: “El texto responsable”, que es una conferencia que dio en el Encuentro de Mujeres del Festival de Cádiz en octubre de 2010; y “Sobre argucias y procedimientos”, un artículo que estaba aún inédito y que vale realmente la pena leer.