Fondo de Olla, inconformistas de la gastronomía



Gourmet

En el inabarcable universo de la Web, el conjunto de páginas sobre cocina son un infinito en sí mismo. Además, como todo el mundo tiene algo para decir en la materia… todo el mundo lo dice. Y aunque la gastronomía evoluciona, no todos sus amantes lo hacen. Tampoco la profesionalización garantiza diversidad de opiniones y puntos de vista. Pero las hay. A nivel local (aunque, ¿qué es local en Internet?), desde hace poco más de dos años existe www.fondodeolla.com, un sitio que parece tener la sencilla pero poco frecuente conducta de cuestionar, no aceptar la convención, llamar a las cosas por su nombre. No casualmente su lema es “Una visión picante de la gastronomía”, justamente en un país en el que no somos mayormente adoradores del chile. “Fondo de Olla fue pensada para ofrecer una visión diferente de la gastronomía, es decir criticar con fundamento y evitando la frivolidad que prevalece en el medio. Nos mantenemos al margen de las gacetillas que son una especie de ‘historia oficial’, no tenemos dobles mensajes. Somos sinceros y, muchas veces, una especie de kamikazes que se la juegan”.
Es lo que explican Juan Carlos Fola (periodista especializado, columnista radial y jefe de prensa de la Asociación de Cooperativas Argentinas) y Cali Fidalgo (locutor y conductor de El alargue, en las madrugadas de Radio La Red), ambos bonaerenses, cuarentones e inconformistas y provocadores “por convicción, de lo contrario estaríamos haciendo las cosas al revés para ganar dinero y nada más. El marketing sirve para vender publicidad y nuestra página es ‘anticomercial’ porque decimos lo que pensamos”.
No creen ser los únicos, ya que “hay un público que es ‘pensante’, pero aún son muchos los snobs que actúan por moda y por ‘ver y ser vistos’, donde lo que importa es que te vean comiendo el plato más caro de la carta y el vino de mayor precio y aparatosidad en cuanto a botella y etiqueta, aunque no sea ni por asomo el de mejor calidad. Por ahora, los snobs siguen ganando”. En cuanto a la importancia del tamaño (de las porciones), dicen que existe “sólo para los que creen que ganan en un tenedor libre porque comen hasta reventar, pero no saben que la comida es reciclada. En cambio, hay cosas que vienen en pequeñas porciones y son maravillosas. Pero también hay restaurantes donde sirven porciones abundantes y a la vez son excelentes”.   
Sobre un presunto rol docente que les podría caber por “destapar la verdad gastronómica”, como dicen en su página, aseguran no ser “tan soberbios como para creer eso, pero una pequeña contribución podemos hacer desde la óptica de una crítica verdadera y no complaciente. Hay un solo periodismo y es el que va con la verdad, el que dice las cosas por su nombre. Eso te puede traer enemigos circunstanciales pero también se gana en credibilidad y en prestigio”. Fondo de Olla es, cómo no, una página para amantes de la comida, y especialmente para quienes no se comen cualquier verdura, no permiten que les den gato por liebre y llaman al pan, pan, y al vino, vino.