El boom nórdico llega a la mesa

Gourmet

Además de series, películas, música, literatura y Estados de bienestar, los manjares escandinavos y afines empiezan a disfrutarse en todo el mundo. Y también aquí.

Por efectos de la globalización, el mundo sigue ancho pero hace rato dejó de ser ajeno. Y se hizo menos ajeno, e incluso menos ancho, cuando a las bondades de Internet en general, se le sumaron las de, por ejemplo, Netflix en particular. Así, pudimos empezar a ver cotidianamente películas y series habladas en idiomas a los que nuestros oídos están poco habituados y en escenarios poco habituales para la mayoría. Del mismo modo que desde los 90, y gracias a la pionera Björk (y sin contar a los pionerísimos ABBA), varias camadas de nuevos artistas islandeses, suecos, noruegos, daneses y finlandeses del pop, el folk y, quizás especialmente, el jazz, la música del otro norte de Europa empezó a sonarnos más familiar, como las novelas policiales suecas y los muebles para armar al estilo de los escandinavos.

La cocina nórdica siempre tuvo una módica presencia por estos pagos, casi exclusivamente a través de los clubes de las respectivas colectividades con sus correspondientes restaurantes. Pero últimamente, aún en pequeñas dosis, empezaron a tener mayor presencia, por ahora en menúes compartidos con especialidades de otras latitudes, esas cocinas sencillas que, por efectos del clima riguroso, no abundan en ingredientes, y sin embargo ofrecen sabores de maravilla.

Una lista incompleta de productos típicos de aquellos pagos debe incluir sí o sí pescados, papas, raíces, carne de cordero, cremas de distinto tipo, yogur, quesos, conservas, encurtidos y ahumados. Y, por supuesto, destilados de alta graduación alcohólica, la excusa perfecta para ponerle calor al frío.

(Algunas de sus recetas típicas pueden verse en el programa Cocina nórdica, canal El Gourmet, lunes a viernes a las 14.30 y 22.30).

 

Gravlax

Ingredientes

1 kg de filet de salmón rosado (en una sola pieza)

250 g de azúcar

250 g de sal entrefina o gruesa

100 g de eneldo fresco

Pimienta negra a gusto

Semillas de coriandro

Ralladura o piel de lima o de limón

 

Preparación

En una fuente colocar el filet de salmón con la piel hacia abajo. Aparte, mezclar el azúcar, la sal, la pimienta y el coriandro apenas aplastados en un mortero, el eneldo y la piel de lima o limón. Distribuir la mezcla sobre el pescado de tal modo que lo cubra de manera uniforme, tapar bien con film y mantener en la heladera durante al menos 24 horas.

 

Presentación

Cortar el salmón en finísimas láminas y acomodarlas en una fuente. Agregarle alcaparras. Servir sobre pan, tostadas o en Bagels con crema ácida (250 g de queso crema o de crema montada, 50 cc de jugo de limón, sal y pimienta).