Entrevista a Carlos “Chapa” Retegui



Deportes

Campeón con Las Leonas, ahora  logró lo que parecía imposible: un oro olímpico con los hombres del hockey sobre césped.

 

 

 

Cuando se dice hockey en la Argentina enseguida se piensa en el seleccionado femenino, que gracias a varias generaciones de jugadoras brillantes (con Luciana Aymar a la cabeza) se ha convertido en una de las principales potencias mundiales de las últimas dos décadas. Y cuando se habla de hockey masculino, la referencia suele ser para la disciplina sobre patines, donde nuestro país es quíntuple campeón mundial. Pero al no tratarse de una disciplina olímpica esos logros no han podido traducirse en medallas. El hockey masculino sobre césped, en cambio, siempre ha venido a la cola. Hasta ahora.

La medalla de oro que la Selección Argentina de hockey sobre césped ganó recientemente en los Juegos Olímpicos de Río fue la única presea de un deporte de conjunto en una competencia que vio además alcanzar la gloria a Paula Pareto en judo y a la dupla de Santiago Lange y Cecilia Carranza en vela. Juan Martín de Potro también hizo podio con la plata en tenis. Pero el primer lugar de Los Leones tal vez haya sido la actuación más sorpresiva de todas. Y Carlos José Retegui, más conocido como Chapa, fue el hacedor de un equipo que ha quedado en la historia grande del deporte nacional.

Retegui nació hace 46 años en San Fernando, donde hoy es además concejal. Como jugador se destacó en la Selección Argentina entre 1989 y 2006, con la cual obtuvo tres medallas de oro y una de plata en Juegos Panamericanos. Estuvo presente en tres Juegos Olímpicos: Atlanta 1996 (noveno puesto), Sidney 2000 (octava posición) y Atenas 2004 (undécima colocación). Esos rendimientos, sumados al décimo puesto de Londres 2012, permiten dimensionar la sorpresa que representó la medalla dorada. La mejor actuación olímpica había sido el 5to puesto de Londres 1948.

El Chapa había asumido la dirección técnica del seleccionado masculino en 2008, reemplazando al gran artífice de Las Leonas Sergio Vigil. Ese mismo año logró el tercer puesto en el Champions Trophy, la tercera competencia mundial en importancia después de los Juegos Olímpicos y de la Copa del Mundo. Tras varios años de trabajo serio y a largo plazo, el segundo batacazo de Retegui como entrenador lo dio en el Campeonato Mundial de 2014, donde la Argentina se quedó por primera vez con una tercera colocación.

Con actuaciones destacadas en esas dos competencias, faltaba coronar el ascenso del hockey masculino en un Juego Olímpico. Y eso fue lo que sucedió en Río 2016. Con dos triunfos, dos empates y una derrota Argentina fue tercera de su grupo y sorteó la fase inicial del torneo. En cuartos de final venció 2 a 1 a España. En semifinales le tocó Alemania, el equipo que mejor rendimiento había tenido hasta ese momento y la despachó con un 5 a 2. En el partido decisivo se cruzó con Bélgica, a quien derrotó 4 a 2 para desatar esa alegría extra que provocan los títulos de los deportes de equipo.

Además de este logro con los varones, Retegui también formó parte de la larga época de gloria de Las Leonas, a quienes dirigió entre 2009 y 2014. La conducción paralela de ambos seleccionados generó controversias y terminó determinando su salida de la rama femenina. Sin embargo, no le impidió llevarlas a la medalla de plata en Londres 2012, al Campeonato Mundial de 2010 disputado en Rosario y a ganar los Champions Trophy de 2009, 2010 y 2012.

Con la gloria ya conquistada, ahora Retegui tendrá la difícil misión de mantener al equipo en los primeros planos para que, como ocurrió con las chicas, este éxito sea el comienzo de un largo camino de protagonismo y no una excepción.